martes, 24 de abril de 2007

Consejos sobre cómo no hacer una maleta

Me voy tres días; a Andorra, a relajarme, de hotel de cuatro estrellas (como una señora). No tengo planeado salir de fiesta, ni hacer nada; sólo relajarme y descansar.
Entonces me surgen varias preguntas:
¿Por qué me llevé una toalla?
¿Por qué me llevé chaqueta y cazadora?
¿Por qué me llevé zapatos, deportivas, chancletas y zapatillas?
¿Por qué me llevé (creo que eran) cinco camisetas?

Respuesta: por qué cabían en la maleta.
No, después de este verano pasado todavía no he aprendido a hacer maletas.
Si, sigo siendo un desastre. Hay cosas que nunca cambian

El finde que viene me vuelvo a ir dos días... casi me sobra con lo puesto... pijama, y una camiseta (más lo que me lleve ya puesto) ¿lo lograré?

viernes, 20 de abril de 2007

Me estoy estresando...

Me voy de puente a un balneario a ver si me relajo. Realmente lo necesito, lo necesito mucho. Mucho no, muchísimo.
Además, últimamente la gente me mira raro cuando les cuento sólo el 10% de lo que actualmente ronda por mi cabeza.
Mi cabeza está cansada, reventada. Estoy al borde del colapso mental ¿por qué será?
A la vuelta, ya os cuento en que ha quedado todo esto.

jueves, 12 de abril de 2007

Blanco


Otra vez, tras ya hace demasiado tiempo, estoy de nuevo ante el lienzo en blanco. Ya tenía ganas; muchas ganas...
En mi cabeza una imagen que quiere salir fuera a través de los pinceles.
Aunque la verdad es que no sé cual de los dos me da más miedo: el lienzo o el papel en blanco. La rabia contenida y las ideas dando tumbos en mi interior... Sólo tengo que darle rienda suelta a la pasión y soltarlo.
¿Qué puede salir de aquí? Nada bueno, seguro

martes, 3 de abril de 2007

El amor está en el aire

Sí está en el aire, lo noto en el ambiente, lo siento por las venas, lo veo en los parques, en las películas, en las plazas de ciudades en las que no había estado antes.
Y me gusta como huele, como sabe, como alimenta las sonrisas... Me gusta el color que le da a las paredes, a los días de lluvia...
Y me gusta sobretodo como crece y como lo envuelve todo, y lo atrapa, y lo deja embobado y sin respuestas. Me gusta como suena en los labios y también en los silencios.

Sigue el camino de baldosas amarillas


Sí, siguelo siempre, porque aunque haya piedras y muchas veces te pierdas y no sigas el camino, al final de él, siempre estará tu sueño.
Si tú no vas en su busca él no va a llamar a tu puerta.